Si bien hay normas y leyes, no siempre son capaces de cumplirlas. Ver cómo incluso piden y exigen más, tanto ayudas social y económicas, no siempre necesitandolad, o promoviendo movimientos inexplicables, tanto de pobreza, destrozos y desprecio a los sanos, como de odio sin comentarlo o malos tratos sutiles en trabajos, áreas sociales y comercios. Suena a mentira, pero hay muchas personas así.
Entonces, seguimos con las ideas de tratamiento, cambio de visión, asumir limitaciones y adaptarse, y reeducación para que dejen de hacer tanto daño, intentar disminuir la crueldad y maldad y reubicar a una mejor vida y existencia para todo/as, especialmente, dentro de una área saludable que no tiene por qué estar reñida con salir a bailar bebiendo un té, un café o un refresco.
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