Pero está de moda, en auge.
Hay mucha gente que se gana la vida fingiendo y actuando, incluso, fuera del escenario. A veces, no son actores profesionales, pero casi mejor que los de verdad.
Y a no todo el mundo le importa si es amor sincero o de verdad. Y hay gente que, con tal de estar con quién le gusta, le da igual si es de verdad o mentira (recordemos cuántas personas ruegan y suplican al o a la ser amado/a, con tal de que estén con ellos/as, sin importar si les quieren de verdad).
Así que, aunque yo discrepo que todo sean montajes o posados como algunos/as modelos de revista, redes y otro lugar que no siempre son pareja de verdad, yo quiero creer que hay de verdad, aún, parejas que se quieren de verdad.
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